Puede parecer que no nos va a pasar nunca, pero sí pasa y más cuando la temperatura sube, por las noches existe un riesgo de tener un insecto en el oído.
Si vivimos en una zona rural, cerca de un parque o en la selva es muy probable que tengamos a estos bichos cerca de nosotros.
No es nada agradable saber que esto puede pasar, aunque el cuerpo tiene sus propios mecanismos de defensa.
Hay vellosidades en los oídos, está el conocido cerumen, no solo tiene la función de lubricar el canal auditivo, también sirve como defensa, protección ante cualquier objeto externo.
Pero no podemos exponernos al riesgo de que se meta un insecto y nos pique, cause algún tipo de infección o bloquear nuestra capacidad auditiva.
Son muchos los riesgos que supone el tener un insecto en el oído, si bien es cierto muchas veces pueden morir dentro del oído sin habernos enterado que han estado ahí.
Es mejor saber qué hacer pues se trata de una parte muy sensible del cuerpo.
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¿Cómo saber si tengo un insecto en el oído?
En realidad no es algo difícil de notar, la señal de alerta más clara es el movimiento que hace el insecto en el oído.
Está tratando de escapar, pero seguramente ya no puede y en ese intento es cuando puede meterse más o si se trata de un insecto venenoso puede empezar a picar.
Incluso sin serlo, puede morder, como lo hace una cucaracha ya que es uno de los insectos más proclives a hacer esto.
Si se mete un insecto en el oído también empezaremos a notar una disminución en la capacidad de oír.
Habrá dolor, también puede haber irritación y en algunos casos sangrado.
Otra señal de alerta es la sensación de mareo, náuseas y puede ocurrir que del oído emane un olor fétido.
¿Por qué y cómo entra un insecto en el oído?
Una de las razones principales por las cuales entran insectos en el oído es porque buscan calor.
Además el oído tiene una forma similar a las ranuras y pequeños lugares donde suelen esconderse.
En resumen, lo que buscan es un espacio que los proteja, así es como muchos insectos llegan a alojarse dentro de nuestro oído.
No es difícil deducir cómo es que logran entrar, basta con que su tamaño les permita entrar por el oído externo para que se escabullan.
Lo más común es que logren meterse mientras dormimos, aunque puede pasar también cuando estamos realizando actividades al aire libre.
Por otro lado son los niños los más propensos a esto, aunque se da también en personas adultas.
Los insectos que suelen meterse en el oído son cucarachas, hormigas, polillas, arañas, mosquitos, mariquitas e incluso gusanos.
¿Qué se debe hacer si se mete un insecto en el oído?
Una vez que confirmamos que tenemos un insecto en el oído, lo primero es mantener la calma ya que saber que un insecto está en nuestra cabeza puede llevar a la desesperación.
Si actuamos con desesperación podríamos empeorar las cosas y hacer que el insecto se meta más y puede haber algún daño en alguna parte interna del oído.
Hay que evitar usar objetos como pinzas para sacar al insecto, esto debería hacerlo un médico ya que cuenta con el instrumental médico adecuado.
Lo que podemos hacer es hacer a un lado la cabeza, hacia donde se encuentra el oído afectado.
Mover la cabeza pero sin rudeza, hay que agitar ligeramente en un intento porque el insecto logre salir.
Se puede aplicar agua tibia para tratar de limpiar el oído, pero esto solo se debe hacer si sabemos que el insecto ya murió y debe ser con mucho cuidado.
Es posible usar aceite de oliva, esto permite lubricar el oído lo cual debería permitir que salga el insecto.
Situaciones en las que se debe acudir al médico
Habrán muchas ocasiones en las que el insecto finalmente no podrá salir, pero el riesgo también implica no solo que se quede ahí, sino que nos provoque otros malestares.
Incluso si el insecto logra salir, es recomendable acudir al médico que normalmente debe derivar al paciente a un otorrinolaringólogo para hacer un examen de oído.
Esto a fin de descartar cualquier complicación, daño o alteración en el canal auditivo que pueda representar un riesgo a futuro.
Si el insecto no puede salir, es necesario acudir al médico.
En caso sientas dolor o haya secreción de pus, debes acudir al médico, incluso puede haber sangrado, ante estos casos es importante ir al centro de salud más cercano.
Cuando hay una alteración en la capacidad auditiva, si sientes que no puedes oír normalmente o si sientes zumbidos es urgente que haya una revisión médica.
En algunos casos puede haber fiebre, escalofríos, puede ser señal de algún tipo de infección y debe ser tratado por un médico.
No hace falta que puedas ver al insecto en el oído, si ya sabes que ingresó y no estás seguro de que salió, pero sientes malestar, debes acudir al médico.
Cosas que se deben evitar hacer
Si bien es cierto hay cosas que podemos hacer por nuestra cuenta, hay que tener mucho cuidado, si metemos objetos largos y punzantes podríamos causar más daño que bien.
Más allá de probar con agua tibia o aceite de oliva, no se recomienda en absoluto el colocar ninguna sustancia química en el oído.
En lo posible debes evitar que tu oído quede obstruido por algún objeto ya que le quitarías la vía de salida al insecto, podría incluso meterse más.