Hoy en día un gran porcentaje de la población mundial pertenece a la tercera edad. Este es un hecho cuyo mérito corresponde a los grandes avances de la medicina y el conocimiento de los beneficios que resultan de llevar una vida saludable.
Es por ello que mantener los buenos hábitos es fundamental para que la calidad de vida de las personas de la tercera edad sea la mejor, y puedan disfrutarla a plenitud. Desde luego, además de los cuidados de la salud, siempre será más que recomendable contar con un buen seguro médico para mayores de 70 años.

De esta manera toda la familia puede sentirse tranquila y disfrutar de la compañía de sus seres queridos. Considerando esto, queremos compartir 8 hábitos saludables que ayudarán a mejorar la calidad de vida de las personas de la tercera edad.
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Mantenerse activos
El ejercicio físico es primordial para que el cuerpo se mantenga saludable y con buena movilidad. Desde luego, no nos referimos a una dura jornada en el gimnasio. Recordemos que cada persona es distinta y será necesario establecer una rutina adaptable a cada quien.
Lo que sí es necesario es mantener la flexibilidad de los músculos y ejercitar la coordinación. Para ello, lo ideal son las caminatas, y para algunos adultos mayores el yoga resulta una excelente idea. Siempre recuerda que, al iniciar el entrenamiento, es recomendable ir paulatinamente, para no sobre exigir al cuerpo y evitar lesiones.
Dejar los malos hábitos y cuidar la salud
El alcohol, el cigarro y otros malos hábitos han hecho daños en el organismo por muchos años. Es momento de dejarles de lado para que el cuerpo pueda eliminar las toxinas y recuperarse un poco. Aunque no lo creas, esto puede mejorar la calidad e incluso la esperanza de vida. ¡Nunca es tarde para estar sano!
El descanso es primordial
En cualquier etapa de la vida, el descanso es esencial para la buena salud. Durante el período de sueño el cuerpo recupera energía y se prepara para asumir los retos de la rutina diaria.
Cumpliendo con la cantidad de horas adecuadas para el descanso profundo, la mente está más alerta y positiva. Con esto, hacer frente a la rutina diaria es mucho más sencillo y los resultados los puedes apreciar de inmediato.
Vigilar la alimentación
Lo mejor para cuidar la salud es llevar una dieta balanceada, vigilando las cantidades adecuadas de proteínas, vitaminas y fibra. Siempre tratando de reducir las calorías innecesarias, las grasas saturadas o los alimentos inadecuados, como la comida chatarra.
Consumir frutas y vegetales ayuda a cuidar el organismo y eliminar las toxinas. Por supuesto, la hidratación es igual de trascendental. Con esto, las personas mayores se sentirán más llenas de energía, ligeros y activos. Además de prevenir enfermedades y combatir la sensación de pesadez y cansancio.
No olvidemos la higiene personal
Si bien es cierto que en todo momento de la vida la higiene personal es muy importante, cuando se trata de adultos mayores, esto cobra una fuerza particular. La razón es que en esta etapa el sistema inmune funciona diferente y es sensible a infecciones o enfermedades.
El cuidado de la higiene repercute también en el estado de ánimo y la autoestima de la persona. Si este punto se encuentra bien atendido, el adulto mayor se sentirá más entusiasmado y deseoso de mantenerse activo y sano.
La soledad no es buena compañía en la tercera edad. Socializar, en cambio, ejercita la memoria e invita al adulto mayor a mantenerse activo e independiente. Además, procura un estado de ánimo positivo, que incentiva a cuidar todos los demás aspectos.

Compartir con la familia y con los viejos y nuevos amigos es necesario para tener una vejez feliz y sana. Es por ello que el contacto con las personas debe ser constante. En los centros especializados hay espacios ideales para socializar con otros adultos mayores, participando además en actividades que los mantienen activos y contentos.
Visitar al doctor en la tercera edad es fundamental
Mantenerse en contacto con los médicos y realizar visitas de rutina ayuda a mantener vigilada la salud, atendiendo los posibles problemas y enfermedades que puedan presentarse durante esta etapa.
Los médicos harán exámenes de rutina, prevención y evaluación de la condición de salud, descartando cualquier indicio de enfermedades o detectándolos para solucionarlos o controlarlos oportunamente.
La mente también necesita ejercitarse
La pérdida de la memoria es uno de los signos más característicos de la vejez y el primero en afectar el estado de ánimo de las personas mayores. Mantener la mente activa evita este problema, e igualmente crea una sensación de productividad.
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Para ejercitar la mente, una manera muy eficaz es aprender nuevas actividades, o simplemente reencontrarse con antiguos pasatiempos. Cualquier idea que motive a al mayor es bienvenida. Incluso, si se trata de tareas con cierto nivel de responsabilidad, acorde a cada persona, es una excelente opción.
Una vejez saludable y feliz
Cada etapa de la vida debe ser disfrutada a plenitud, sacando de ella el máximo provecho y encontrando su lado más positivo. Las personas mayores no deben detener sus rutinas a causa de la edad. Al contrario, lo ideal es ajustar las actividades para poder seguir disfrutando de ellas.
Incluso, en la mayoría de los casos, esta es una etapa perfecta para reencontrarse con algunos sueños olvidados o concretar aspiraciones personales que quedaron guardados. Iniciar un nuevo proyecto puede ser una idea fenomenal para inyectarse ánimos y mantenerse activos.
Toma nota de estos hábitos para mejorar la calidad de vida de las personas en esta etapa y aplícalas. Notarás los cambios positivos casi de inmediato.